domingo, 9 de febrero de 2014

NASCAR y NFL

NASCAR y NFL dos deportes que tienen 2 cosas en común, son 2 de mis pasiones y su mayor evento a nivel mediático se celebra en Febrero. ¡Un momento! ¿Solamente 2 cosas en común? Creo que si rascamos un poco podemos encontrar más cosas que las unan. ¡Vamos a ello entonces!



Una exhaustiva búsqueda (como de media hora) por los vastos mundos de internet solo me ha dado un resultado sobre una persona que haya vestido los cascos de los dos disciplinas de forma profesional, el kicker campeón de 2 Superbowls con los San Francisco 49ers Mike Cofer.
Cofer compitió en las citas de Indianápolis Raceway Park, Phoenix y Miami de la serie de camionetas en 2002. Un 21er puesto en Phoenix fue el mejor resultado. No es algo como para guardar en letras de oro pero estamos empezando con esto, paciencia.
 

Un poco más duradero fue el paso por los garajes de el ex-entrenador de Oilers y Falcons, Jerry Glanville. Durante 7 temporadas fue alternando apariciones esporádicas entre la serie Busch y las
camionetas haciendo las funciones de propietario/piloto. Un 20º puesto en la Busch corriendo para Lewis Cooper Racing en Volusia y tres 14º en la Craftsman con su equipo son sus mejores resultados.

Compaginar la práctica de los deportes estamos viendo que no es lo más habitual. La relación más extendida a sido a través del $$$. Una relación que se puede visualizar situando la NASCAR como un pozo negro sin fondo donde ex-jugadores NFL han decidido tirar parte de sus ahorros conseguidos a lo largo de sus carreras. Y más que jugadores concretamente quarterbacks.
Terry Bradshaw, HOF y 4 veces campeón de la Superbowl con Pittsburgh Steelers compró una parte del equipo de la serie Busch, HighLine Performance Group, junto a Armando Fitz para crear FitzBradshaw Racing (se rumorea que Bradshaw se quedó calvo a raiz de tanto pensar el nombre para el equipo).
Un 2º puesto de Mike Bliss en Memphis es el mejor resultado de un equipo que incluso tuvo algún escarceo con la Copa con un 36º puesto de Ron Hornaday en Phoenix, como mejor resultado. El equipo cerró sus puertas en 2009.

Seguimos con QB's y Busch series y tenemos ahora a Brett Favre, ganador de la Superbowl con los Green Bay Packers, que decidió unir fuerzas con otro campeón (en este caso de la Winston cup)
Dale Jarrett. Juntos formaron Jarrett/Favre Motorsports (otro nombre para la historia) un equipo que solo duró 2 temporadas en la Busch con un 5º puesto de Kenny Irwin Jr. en Dover como mejor resultado.

Tiene que haber algo en el champán que te bebes cuando ganas un Lombardi que hace que quieras montar un equipo de NASCAR, porque vamos ya a por el 3er QB ganador de Superbowl que se mete en el mundo de girar a la izquierda cada 1/2 milla. En este caso es Mark Rypien 2 veces ganador de la Superbowl con Washington Redskins y más importante aún, padre de esta señorita.



Rypien se unió a ppc Racing para poner en pista un coche para su amigo Chad Little durante 5 temporadas en la Winston Cup, más alguna participación esporádica en Busch series. Ningún resultado destacable durante ese tiempo, pero años más tarde, después de vender el equipo a Roush Racing, ese equipo sería campeón con Kurt Busch al volante.

Hasta ahora parece que tener un QB ganador de la Superbowl no es garantía de éxito. ¿Y si tenemos a 2 QB's ganadores? Esta debe ser la conclusión a la que debieron llegar Roger Staubach (2 anillos con Dallas Cowboys) y Troy Aikman (3 anillos también con Dallas) para fundar en 2005 "Hall of Fame Racing" ("No Tenemos Abuela Racing" para los amigos).
Un 3er puesto en Infineon con Terry Labonte en 2006 y otro 3º en New Hampshire en 2008 con J.J.Yeley son los "Highlights" de un equipo que en sus 5 años de vida trabajó con 3 marcas diferentes (Ford, Chevy y Toyota) y que dio a Joey Logano la oportunidad de debutar en la Copa. Como viene siendo la tónica habitual, cuando el equipo cerró sus puertas en 2010 ya hacía 2 años que los dos QB's habían volado del garaje.

Ha quedado claro que ser ganador de la Superbowl no es un componente muy necesario para hacer que un coche vaya rápido. Pues ya no te digo si ni siquiera acreditas ese título a la hora de formar el equipo. Dos ilustres QB's NO-ganadores de SB como Dan Marino y Jim Kelly también se acercaron al mundo de las carreras y contagiaron su "e$píritu" ganador a dos equipos. Elliott-Marino Motorsports y Frank Cicci Racing with Jim Kelly son otros dos claros ejemplos de que NO hacer con el dinero de tu jubilación.

 

¿Cansado de tanto quarterback? Bueno, han sido mayoría pero no han sido los únicos jugadores de NFL en los garajes. Joe Washington, runningback campeón de la Superbowl con Washington Redskins, se unió a la leyenda del baloncesto Julius "Dr. J" Erving para crear el primer equipo propiedad de una "minoría racial" en la serie Busch. La idea era tratar de atraer al público afro-americano al mundo de NASCAR. Un top-10 en Atalanta es el pobre bagaje de un equipo que duró 2 años en pista.

Y por fin vamos a llegar a un atisbo de un mínimo de éxito de la mano de Randy Moss. "The Freak", uno de los mejores receptores de la historia de la NFL, decidió comprar en 2008 una parte del equipo Morgan-Dollar Motorsports de la serie Craftsman que pasó a denominarse Randy Moss Motorsports (Who is the boss?).
3 victorias durante 2009 de la mano del ex-campeón de la serie Mike Skinner y un 3er puesto final en el campeonato es algo que miran con envidia todos los que han precedido estas lineas. Pero poco dura la alegría en el garaje del jugador NFL y una fuga de personal y patrocinio después de ese esperanzador año, hizo que el equipo cerrase sus puertas en 2012.
Además conviene recordar que Randy Moss participó de jurado en el evento del All-Star de NASCAR más disparatado que ha conocido el hombre.


Un camino de piedras y una sangría de dinero es la constante hasta ahora. Está claro que si has estado involucrado en la NFL lo mejor es que te alejes de los circuitos como del demonio. Salvo si eres la excepción que confirma la regla: Joe Gibbs.
Legendario entrenador de Washington Redskins que ganó 3 Superbowls con los capitalinos y que llevó al equipo creado junto a su hijo Jason Dean a ganar otros tantos campeonatos de la Sprint Cup en '00, '02 y '05 (más otro de Nationwide en 2009). Y no estamos hablando de éxitos pasados, actualmente Joe Gibbs Racing es uno de los equipos de referencia de la categoría como así demuestran sus 203 victorias en las dos máximas categorías de NASCAR.

Pero no todo es blanco o negro ni éxito o fracaso. El garaje de NASCAR está plagado de jugadores universitarios de football (y de otras disciplinas como baseball o hockey) que han encontrado una forma de ganarse la vida siendo miembro de los pit crew.
Tim Goad antiguo DT de Patriots, Browns y Ravens
La profesionalización de estos equipos está aumentando cada año y muchos de ellos aseguran que el entrenamiento que realizan para poder hacer esas paradas supersónicas no desmerecen en absoluto al entrenamiento que recibían cuando estaban en la universidad.

Por otro lado, NASCAR y NFL comparten últimamente preocupaciones comunes como es el tema de las conmociones cerebrales. Este año se pondrá en marcha antes de Daytona un programa de test que se realizará a los pilotos para comparar los resultados antes y después de sufrir un accidente. Este test también es obligatorio en los training camp de la NFL. Conviene recordar que Dale Earnhardt Jr. se perdió varias carreras hace dos temporadas a causa de la conmoción cerebral que sufrió tras dos accidentes en semanas consecutivas. Durante su baja visitó el programa de Medicina Deportiva de la Universidad de Pittsburgh que tiene un convenio de colaboración con los Pittsburgh Steelers.

Así que ya hemos visto que NASCAR y NFL tienen muchas más cosas en común de las que nos imaginábamos. Tanto que a veces hasta comparten un mismo escenario, aunque no a la vez claro!! (aunque no sería mala idea...). En 1956 Fireball Roberts (el mejor nickname de piloto EVER) ganó la única carrera de Grand National disputada en una pista corta creada en el interior del Soldier Field de Chicago, hogar de los Chicago Bears.
Dos carreras más de la serie de convertibles se disputaron también en el '56 y en el '57. Tal vez por eso, el football quiere devolver la moneda. Por lo que el 10 de septiembre de 2016, está previsto que se dispute en el infield del Bristol Motor Speedway un partido de football de NCAA entre las universidades de Virginia Tech (Hooookies!!) y Tennessee. El record de asistencia en directo en un partido de college está en 115.109 espectadores, Thunder Valley puede acoger a 160.000 espectadores. ¿Se conseguirá romper el record?


1 comentario:

Javier G dijo...

Quiero más asiduidad!!! ;)